lunes, 23 de diciembre de 2019

Resumen del año 2019 y expectativas para 2020

El año 2019 ha pasado rápidamente y como costumbre tradicional en un blog de viajes, toca hacer repaso de lo que ha sido y también, expectativas y deseos para el año que viene.

Si tuviéramos que hacer un resumen de lo que ha sido 2019, sin duda, la definiría como de haber cumplidos algunos sueños que todo viajero desea hacer.

En lo referente a viajes al extranjero, mi mujer y yo estuvimos un mes (entre mediados de enero a febrero) en Egipto conociendo su impresionante civilización, con un legado histórico y arquitectónico difícil de ver en otras latitudes. Además, fuimos en unos meses donde aún el calor no es un gran obstáculo para poder disfrutar. Creo que si se va al país de los faraones, esa época del año, no está nada mal ya que difícilmente las temperaturas superan los 30 grados.



El Complejo de Giza, cerca de El Cairo

El hermoso Río Nilo a su paso por Asuán


Otro gran viaje que realizamos durante cinco semanas (entre mediados de agosto y finales de septiembre), fue al Cáucaso (Azerbaiyán, Armenia y Georgia). De este viaje, no hemos hablado aún en el blog pero como una somera introducción, es una zona del planeta muy interesante de visitar por diversos factores, que va desde el geoestratégico y para el caso del turismo, por su diversidad paisajística, histórica y cultural.

Quizá de estos tres países, ahora mismo Georgia es el que está más de moda pero Armenia y Azerbaiyán (ambos enemigos acérrimos) también tienen mucho que ofrecer y no defraudará a ningún viajero. Como he indicado, de esta hermosa zona del mundo hablaré largo y tendido en posteriores posts.

Bakú, capital de Azerbaiyán

Tiflis, capital de Georgia

Ereván, capital de Armenia


Durante este viaje, tuvimos la oportunidad de hacer escala y conocer las dos principales ciudades de Kazajistán, Almaty y Nur Sultán, tan opuestas y diferentes entre si.

La futurista Nur Sultán, capital de Kazajistán

Y la señorial Almaty, segunda ciudad más importante de Kazajistán


Y el último viaje que realizamos este año fue un combinado entre Hong Kong y la isla japonesa de Okinawa. Viviendo ahora mismo en China y viendo los graves problemas que están asolando la antigua colonia británica de Hong Kong (y actualmente el símbolo de “un país, dos sistemas” en China), decidimos ir y sin duda, fue una experiencia interesante ya que no todo el territorio es hostil y esa gran ciudad, se merece una visita. Hace cinco años que no habíamos ido pero en esta ocasión, nos centramos en la gran naturaleza que también podemos disfrutar. No todo en Hong Kong son grandes rascacielos y ejecutivos. Hay también otra parte y muy desconocida y cautivadora.




No hay que tener miedo, ya que las revueltas están concentradas en una mínima parte del territorio  y los hongkoneses ahora mismo, necesitan de apoyo económico para salir de la grave crisis que ha entrado por dichos altercados.

El famoso skyline de Hong Kong visto desde su bahía


Y con respecto a Okinawa, pues simple y llanamente, un paraíso oculto. Disfrutar de hermosas playas y una frondosa naturaleza prácticamente solos y con los estándares de calidad, educación y respeto que impera en todo Japón, no tiene precio. Además, pudimos conocer la trágica historia de dicha isla ya que en ella, fue donde tuvo lugar las últimas batallas atroces de la Segunda Guerra Mundial en la zona del Pacífico.

Y si, en Japón también hay playas así de hermosas


Y por supuesto, viviendo ahora en este país con dimensiones de continente que es China, por supuesto que también visitamos algunas ciudades. Aparte de Hong Kong, también tuvimos la oportunidad de visitar Dalian, una hermosa ciudad a orillas del Mar Amarillo y que fue una de las últimas urbes que fue devuelta a China tras la Segunda Guerra Mundial. Está considerada como una de las mejores urbes para vivir de este país.

Dalian, una combinación perfecta de naturaleza y ciudad


Y si hay una zona que me encanta de este país por su historia es la denominada Manchuria, ubicada en el noreste. Pudimos conocer la ciudad de Changchún, donde se encuentra el antiguo Palacio Imperial de Manchukúo y la ciudad de Shengyang, con una ciudad imperial muy similar la famosa Ciudad Prohibida de Pekín.

El antiguo Palacio Imperial de Manchukúo, en Changchún

El Palacio Imperial de Shengyang


Y por supuesto, cerca de Pekín también visitamos algunos lugares que prácticamente pasan desapercibidos para el gran público pero si se tiene tiempo, también se merecen una visita. Entre ellos, indicaría el pueblo de Jimingyi, una antigua fonda postal de la época imperial china y que prácticamente no ha cambiado su fisionomía ni arquitectura en los últimos 100 años. Un auténtico viaje en el tiempo.

Una vista de la muralla de Jimingyi


También, dentro de la ciudad hay innumerables monumentos y museos que no están en el circuito turístico pero que merecen también mucho la pena.

En lo que respecta a planes para 2020, el único viaje que tenemos cerrado es estar un mes de vacaciones en mi querida tierra, Gran Canaria, durante gran parte del mes de febrero. Lo bueno de mi isla es que, independientemente de cuando se viaje, siempre hay buen clima.

Y con respecto a otros lugares a visitar, pues tenemos varios en mente. Quizá nos quitemos la espina clavada de este año de no haber ido a Mongolia y en cuanto haya allá buen tiempo, estar sobre una semana disfrutando de sus infinitas praderas y naturaleza virgen.

También, Asia Central nos gusta mucho y una opción podría ser visitar Kirguistán y Tayikistán, vía Kazajistán. Este viaje nos serviría también para conocer otras regiones kazajas ya que es un país que por lo poco que vimos, nos maravilló. Turkmenistán, por sus grandes dificultades para obtener un visado, lo dejamos como misión imposible prácticamente.

También, entre nuestros planes está repetir la isla de Okinawa  combinándola con un viaje a alguna gran isla de Japón poco conocida como podría ser Kyushu o Shikoku. En Tokio ya hemos estado dos veces y tras conocer grandes urbes japonesas, ya lo que nos fascina de este país es el Japón profundo y tradicional.

Y con respecto a China, para el año 2020 está prevista la inauguración de una gran parte de la vía ferroviaria de trenes de alta velocidad en el norte de China, con motivo de los JJOO de invierno en 2022. Este avance de insfraestructuras, hará que viajar por esta parte del país, pase a durar de unos 5 a 8 horas, en quizá no más de dos horas con los nuevos ferrocarriles. Algo que hará que pueda visitarse muchos lugares en un fin de semana.

Al menos hay objetivos y planes, que eso siempre anima…


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