miércoles, 16 de marzo de 2022

Escapadas en China (XXIV). El Lago Qinghai y alrededores

Desde que mi esposa y yo llegamos a China, uno de los lugares que teníamos más en nuestra mente visitar, era el Lago Qinghai, al oeste de este país.

En mayo de 2021, tuvimos esa hermosa oportunidad y hemos de decir, que disfrutamos de unos parajes naturales preciosos y de una inmensa soledad en gran parte del recorrido, que difícilmente, lo podremos conseguir en otras partes del mundo. Quizá, al haber tenido esta sensación en China, tiene un premio doble al ser un país tan densamente poblado pero, bien es cierto, que existen vastas regiones donde la densidad de habitantes por kilómetros cuadrado es tan baja, que pese a esa visión de ser un país tan poblado (que lo es, con sus mil cuatrocientos millones de habitantes), es muy fácil ver regiones muy solitarias. E incluso, a unas pocas decenas de kilómetros de Pekín, es fácil muchas veces estar en un sendero totalmente solo caminando.

Además, también es una región donde es muy fácil ver cultura tibetana, con templos que, en muchos años, prácticamente no ha cambiado en nada, ni en su arquitectura ni en su forma de vida.


UBICACIÓN

El Lago Qinghai se encuentra en la región china occidental del mismo nombre, Qinghai. Normalmente, se toma la capital de ella, Xining, como punto de partida para la expedición por esta zona.



La superficie de dicho lago, es de 4.500 kilómetros, aunque, por desgracia, su tamaño poco a poco va decrementando.

CÓMO LLEGAR

Como habíamos comentado, para llegar a la costa del Lago Qinghai, se suele tomar como referencia la ciudad de Xining, capital de dicha región.

Ya, si no se tiene la opción de alquilar un coche, normalmente en la gran mayoría de hoteles, se suele ofrecer la posibilidad del transporte hasta dicho lago. Para hacerse una referencia, normalmente, un día suele costar entre 300 y 400 yuanes por coche, con conductor.

Afortunadamente, mi esposa y yo, al tener una licencia de conducción china, pudimos alquilar un coche y ver, con total independencia de horarios y sin ataduras, dicha zona. Sin duda, es un punto a favor muy interesante esta posibilidad, al permitirnos pararnos donde deseemos y disfrutar de la naturaleza.

El coche que alquilamos en una parada en Qinghai


CUANDO IR

Otro aspecto importante a la hora de visitar este lago, es la época del año. Mi esposa y yo fuimos casi a finales de mayo (de 2021) y teniendo en cuenta también que es una zona muy ventosa, cuando estábamos al aire libre, había que estar abrigado la gran mayoría del tiempo. Además, la alta altitud de esta zona, unos 3.200 metros sobre el nivel del mar, hace que, para latitudes similares en otras zonas del globo terráqueo, haya más frío.

Quizá, una buena época sería entre mayo y septiembre, que es cuando, por desgracia, suele ir la gran mayoría de los visitantes a dicha zona.

DONDE ALOJARSE

 Al igual que en el post anterior, que hablamos de Xining, lo que, en otras partes del mundo, sería una tarea fácil, en nuestras dos noches en esta zona, se nos complicó mucho.

No por parte de los hoteles, que se portaron de maravilla con nosotros, dándonos incluso facilidades y mejores habitaciones de las que pagamos, sino de las autoridades chinas.

La forma que afrontamos nuestra visita a bordear este lago, fue tener asegurada la primera noche en un hotel. La segunda noche, ya según donde estuviéramos y ganas de seguir conduciendo.

Hay que tener en cuenta que en la gran mayoría del Lago Qinghai, la oferta de alojamiento es prácticamente nula, cosa que se agradece mucho ya que es una gran zona natural protegida y de eso se trata. Cada decenas de kilómetros, aparece algún que otro hotel de carretera (con servicios básicos) y hay que aprovechar para parar, ya sea para pernoctar o comer algo.

Bueno, pues el primer hotel, lo reservamos en la web Trip.com, especializada en hoteles chinos. Su nombre es West Coast Holiday Hotel, que estuvo bien y que además se encontraba justo enfrente de una zona accesible a la costa del Lago Qinghai. Hay que tener en cuenta que, al ser una zona natural protegida, el poder acceder al agua en si, no siempre se puede.

Tras registrarnos en dicho hotel y en el que nos habíamos asegurado anteriormente que los extranjeros podían alojarse en él (no todos los hoteles chinos tienen esa posibilidad ya que deben tener un permiso de las autoridades), a la media hora de estar en nuestra habitación y descansando un poco, vemos por la ventana que hay un coche de la policía. Aproximadamente, a los cinco minutos tocan en nuestra puerta y le abrimos. Ahí nos pide nuestros pasaportes, nuestro itinerario, billetes de avión, tren, etc. Lógicamente, en esta situación, y tratándose de China, uno no se puede negar y gustosamente (no teníamos nada que ocultar) le dimos toda la información que nos requerían. 

Tras, posteriormente, dichos policías hablar con un superior por teléfono, nos indican que no nos podíamos alojar en dicho hotel y que debíamos regresar a Xining. Eso, siendo las seis de la tarde aproximadamente y con unas tres de recorrido para volver a Xining y sin hotel reservado, le indicamos que era inviable. Afortunadamente, al final cedieron aunque nos indicaron que debíamos dejar el hotel al día siguiente antes de las nueve de la mañana, cosa que hicimos.

En el hotel del día siguiente, cuyo nombre es Wang Hu Jiu Dian(望湖酒店 en chino) y situado en la costa sur del lago, el modus operandi fue prácticamente igual. En esta ocasión, no teníamos reserva anticipada ya que no sabíamos cuando nos cansaríamos de conducir y siendo ya las cinco de la tarde y a fin de no aventurarnos ya entrando la noche, vimos un hotel y decidimos parar. Tras registrarnos satisfactoriamente, a la media hora aproximadamente, nos tocó la policía en la puerta y lo mismo, ver la documentación del viaje y sacar fotos de todo.

Afortunadamente, estuvimos dos noches únicamente en el Lago Qinghai, ya que pese a que la experiencia fue preciosa, todos estos controles, lastran un poco el estado de ánimo ya deseábamos terminar con ello.

DONDE COMER

La gran mayoría del Lago Qinghai, es una inmensa zona natural virgen. Por tanto, en cuanto se vea un restaurante, sería idóneo realizar una parada. También, es conveniente llevar bastante agua para beber durante el camino. Salvo en el turístico Lago Chaka, que comentaremos más abajo, el resto del Lago Qinghai, no ofrece muchas alternativas, salvo algunos pequeñas localidades que nos encontramos por el camino, y que indico en la narración del viaje.

QUÉ VER EN EL LAGO QINGHAI

Desgraciadamente, los servicios de Google en China están bloqueados y ello merma bastante a la hora de utilizar el servicio de mapas de Google Maps, que la gran mayoría de las rutas sugeridas, suelen estar desfasadas.

China es un país que cada año, construye miles de kilómetros de carreteras y constantemente va cambiando la vía para acceder de un punto a otro.

La alternativa que se utiliza en este país, es Baidu Maps.  Pero el problema, es que únicamente ofrece sus servicios en chino y, por tanto, estaríamos ante el mismo problema.

Por tanto, pese a todo y para una mejor comprensión, utilizaré la sugerencia que nos ofrece Google Maps.

La ruta que se sugiere es la siguiente y la relataré en los días que estuvimos recorriendo dicho lago.


Día 1: De Xining a la costa oeste del Lago Qinghai

Nuestro recorrido empezó pronto desde Xining. A las nueve de la mañana ya estábamos en marcha ya que no sabíamos lo que nos podríamos encontrar. En esta ocasión, teníamos una meta y era el hotel que habíamos reservado anteriormente, al oeste del lago, como comenté anteriormente.

Tras unas decenas de kilómetros en autopista, ya empezamos a divisar la gran meseta, con montañas nevadas al fondo que precede al Lago Qinghai.





 Asimismo, la inmensa ruta ferroviaria que une la ciudad de Xining con la Lhasa, la capital del Tíbet, y catalogado como uno de los trayectos en tren más hermosos del mundo.




Sinceramente, nos fascina la inmensa soledad que divisamos a lo largo del trayecto, donde es muy difícil ver siquiera una casa. Un auténtico descanso para todos los sentidos.





Y ya, por fin, divisamos el hermoso Lago Qinghai. Su tamaño, de unos 4.500 kilómetros cuadrados, hace que no se divise la costa opuesta, dando una sensación de ver el mar.





Ya muy cerca de nuestro hotel, a unos 10 kilómetros de nuestro hotel, se encuentra la localidad de Quanjixiang (ver ubicación en Google Maps). Al bajarnos del coche, para comprar algo, muchos paisanos se extrañan de ver extranjeros. La lejanía de estas tierras junto con la pandemia, ha hecho que probablemente el número de foráneos por esas latitudes, haya decrementado mucho en estos últimos años. 





Finalmente, llegamos a nuestro hotel, donde tras los problemas con la policía que comentamos antes, damos un paseo por la costa del Lago Qinghai, a unos 100 metros de dicho hotel. 

La fachada de nuestro hotel desde la orilla del Lago Qinghai



Las vistas del Lago Qinghai desde nuestra habitación


Asimismo, desde la azotea del hotel, se ve la gran explanada que conforma esta región.




Día 2: De la costa oeste a la costa sur, pasando por el Lago Chaka

Este fue el único día que realmente tuvimos una excursión turística, concretamente el Lago Chaka. Pero antes de llegar, pudimos disfrutar de este amplio lago, con su magnificencia y belleza.





Desgraciadamente, llegamos a un punto que el tráfico se hace más denso y esa tranquilidad que habíamos tenido antes, se acaba. No obstante, hay que tener en cuenta que para ir al Lago Chaka, ya cogemos carreteras más convencionales y que atraviesan toda esta región, con camiones de mercancías.




El Lago Chaka, sin duda alguna, es una de las principales atracciones de la región de Qinghai y se recomienda encarecidamente su visita. Para ello, hay diversas opciones para llegar a él y, aparte de un coche alquilado como fue nuestro caso, son las siguientes:

1. Tome el autobús desde la estación de autobuses de Xining Xinninglu o la estación de autobuses de Xining (cerca de la estación de tren de Xining) hasta el lago salado de Chaka (60 CNY, unos ocho euros).

2. Alquilar un coche con conductor desde Xining. Cuesta alrededor de CNY 400 (unos 55 euros) por un viaje de ida y vuelta.

3. Tome el autobús desde la estación de autobuses de Xining hasta Ulan o Delhi (Delingha). Pasa por Chaka.

4. En la temporada alta de cada año, dependiendo de la cantidad de turistas, habrá un tren turístico Y961/2 que conectará Xining y Chaka en servicio. Generalmente todos los días el tren sale de Xining a las 08:25 y llega a Chaka a las 12:23; regresa de Chaka a las 17:00 y llega a Xining a las 21:13. Verifique la información localmente para hacer la confirmación.

Este lago salino cristalizado natural se considera la puerta de entrada oriental a la cuenca de Qaidam, que alberga la mina de sal más grande del mundo. Ubicado a una altitud de 3.059 metros, el lago tiene forma ovalada y cubre un área de 105 kilómetros cuadrados. Sin embargo, es el más pequeño entre los varios lagos salados en el área de Qaidam, pero se diferencia de los demás por la coexistencia de sal sólida y líquida. El lecho del lago blanco como la nieve y el agua azul cristalina contra el cielo azul le otorgan la reputación de "Espejo del cielo". Es viajar a un mundo de sal tan hermoso incrustado en las montañas nevadas y los prados verdes que los turistas inevitablemente se sentirán como si estuvieran en un país de hadas.





El Lago Chaka tiene la historia más larga de explotación (más de 3000 años) entre todos los lagos salados en la cuenca de Qaidam. Debido a las grandes reservas, la extracción no es nada difícil ya que se pueden obtener sales naturales con solo descubrir la capa superior del lago. La minería a gran escala se realiza mecánicamente hoy en día con muchos grados de sal que se venden en China e incluso se exportan a Japón y Nepal.





El precio de la entrada a este recinto, de mayo a octubre, es de 60 yuanes (unos 9 euros), mientras que, de noviembre a abril, vale 30 yuanes (unos 4,5 euros). Para llegar hasta el extremo de las salinas, se puede coger un tren turístico, por 50 yuanes (unos ocho euros), aunque es perfectamente prescindible y se puede ir caminando.




El horario de apertura es de abril a octubre, de 05:30 a 22:00 y de noviembre a abril, de 08:30 a 18:00.

A lo largo de todo el complejo, hay pequeños puestos donde se vende bebidas, pequeños snacks, etc. Asimismo, a la entrada hay un edificio con centro de información y pequeños restaurantes.

Centro de información al turista


Conviene tomarse unas horas para visitar este hermoso lugar. En los alrededores, hay hoteles donde alojarse, por si no deseara buscar alojamiento a posteriori.

Tras terminar de visitar dicho lago, nos tocaba buscar hotel, ya que en esta ocasión, no habíamos reservado al no saber cuanto tiempo estaríamos en esta atracción.

Tras conducir una hora aproximadamente, y no haber visto ningún alojamiento antes, vimos que había una serie de tres hoteles juntos. Preguntamos en ellos y todos eran de la misma calidad y nos decantamos por uno que parecía más tranquilo. La noche, para dos personas, costaba unos 15 euros. Aquí, al igual que la noche anterior, tuvimos la visita de la policía, con sus interminables preguntas y sacando fotos con sus móviles de toda nuestra documentación.

Fachad de nuestro hotel

Nuestro hotel


Esta serie de hoteles que vimos, ni siquiera aparece en la web www.trip.com, especializada en hoteles chinos. Para hacerse una idea de su ubicación y si usa Baidu Maps, puede poner como referencia el pueblo de Wenba (文巴村 en chino). En el mapa que puse arriba, de Google Maps, está la situación aproximada.

Día 3: De la costa sur a Xining

A aproximadamente unos doscientos metros de nuestro hotel, vimos que había un pequeño monasterio tibetano, concretamente en el pueblo que indicamos arriba, Wenba (文巴村 en chino).





Nos dirigimos a él la tarde anterior, tras registrarnos y al día siguiente, antes de partir para Xining. Aquí ya se nota que es un lugar totalmente alejado de las rutas turísticas y que, dicho pueblo, se limite probablemente a ser visitado por algún huésped de los hoteles cercanos. También, uno piensa a veces en los pocos residentes de ese pueblo, las condiciones tan hostiles que debe vivir en el duro y largo invierno de Qinghai, que incluso a finales de mayo, aún hace fresco de día.




Tras volver a coger el coche y viendo hermosos paisajes, vemos que hay una localidad con un número relativamente grande de hoteles para lo que habíamos visto antes. Decidimos parar a fin de estirar un poco las piernas y comprar algo. También, vemos una pequeña carretera con dirección a la orilla del Lago Qinghai, que podemos ver que hay bastantes coches aparcados. Decidimos mi esposa y yo ir a ver a que se debía.





Esta localidad, en concreto, se llama Qinghaihu Erlangjian (ver ubicación en Google Maps) y pudimos ver que es como un gran centro turístico para que los visitantes, debido a la relativa cercanía con Xining, puedan ver el Lago Qinghai. Como en los estándares chinos gusta mucho este tipo de atracciones, pues ahí se podía alquilar un quad, una bici, comprar artesanía y, desgraciadamente, había yaks que servían de reclamo fotográfico para los visitantes. 





Si no dispone de mucho tiempo o está limitado en alquilar un automóvil, alojarse en esta localidad tal vez sea una buena idea. Está como a una hora y media en coche de Xining y está provista de todos los servicios, como alojamiento y restaurantes. El problema es que en el fondo, “disfrutará” de un Lago Qinghai poco auténtico y con características chinas, es decir, un entorno muy de atracciones turísticas.





Ya, tras terminar de ver este pueblo, nos dirigimos a Xining, viendo ya los últimos coletazos de estos preciosos paisajes.



Tras la información que había recopilado la policía en nuestras dos noches de estancia en el Lago Qinghai, ya sabían todos nuestros pasos futuros y al llegar al hotel de Xining, y tras hacer el check in en el hotel, enseguida una persona se identificó como policía a la recepcionista (que sabía de nuestra llegada) y le pasó toda la documentación a dicho policía. Ya nos extrañaba que, durante nuestro registro, la recepcionista nos preguntara por nuestra reserva de billete de avión al siguiente destino, Dunhuang, para fotocopiarla. Toda esta aventura, la narré en nuestro post sobre Xining.

Pero bueno, la vida me ha enseñado a que me quede siempre con lo positivo y que el haber tenido la oportunidad de visitar esta hermosa región de China, nunca se nos borrará de la retina.

Otros posts sobre ciudades de China en este blog:


No hay comentarios:

Publicar un comentario