Georgia está llamada a ser un gran referente
en el turismo. De hecho, según la Lonely Planet, fue uno de los destinos
recomendables para 2018.
Es un país que pese a su limitado tamaño,
casi 70.000 kilómetros cuadrados, ofrece una gran diversidad paisajística,
desde las montañas del Cáucaso a las playas del Mar Negro o senderos de un gran
vergel.
Si a eso le unimos una gran historia que ha
quedado plasmada en muchas ciudades del país, sin duda tendremos una mezcla
bastante interesante y que cuando se normalice la situación, sería interesante
visitar Georgia. De hecho, ya ha sido uno de los primeros países que dentro de
poco, se abrirá al turismo exterior.
En el fondo, y al igual que ha ocurrido en
muchos países, la economía ha imperado y Georgia, sumida en cíclicas crisis
económicas y sociales, necesita de la riqueza que le da el turismo.